¿Qué
sabes del Greco?
La conmemoración del IV
Centenario de la muerte del Greco será
todo un hito en la historia del pintor y de Toledo: la gran reunión de obras
del artista que se ha programado para 2014 congregará la mayor parte de
su producción, que llegará de todos los rincones del mundo. Grandes muestras de la obra del
artista centrarán la amplia programación del Año del Greco, que tendrá su
escenario principal en esta ciudad.
Pero, ¿qué sabes del Greco?. Si sientes curiosidad, para cinco minutos y lee...
A grandes
rasgos, todos sabemos que el Greco en realidad se llamaba Doménico Theotocópoli
(o Doménikos Theotokopoulos, que suena más griego), que vino de Creta, y que
después de su paso por Italia, se asentó en Toledo y allí desarrolló la mayor
parte de su obra. En esta ciudad nació su hijo y en ella murió después de casi
cuarenta años viviendo en España (estas son sus fechas 1541-1614).
Además, según
cuál sea nuestra generación, habremos crecido con una u otra idea acerca de su
estilo. Para los que nacimos a finales del s. XX puede ser, o bien que tenía un
defecto en la vista y por eso sus figuras eran alargadas, o bien que es el
mejor representante de la España mística de la Contrarreforma.
Cada artista,
al crear y mostrar su obra a los demás, está exponiendo a la opinión pública
una parte de sí mismo muy íntima, su manera de hacer, su manera de pensar y su
manera de sentir. En general, los artistas son conscientes de esta situación,
por eso son artistas, y lo manejan lo mejor posible. Algunos, como Van Gogh, no
tuvieron la oportunidad en vida de debatir con el público acerca de lo que
querían decir en sus obras. Otros, como Picasso, que disfrutó de un gran éxito
durante prácticamente toda su carrera, trataron de explicar con palabras lo que
ya habían contado con los pinceles, y a veces se cansaban o se enojaban porque
no se les había entendido bien.
¿Qué pensaría
el Greco de todo lo que se ha dicho de él? En su caso, puede que no alcanzara
el estatus y la fama de Picasso en su época, pero tampoco vivió sólo y aislado
como Van Gogh. Conoció cierto éxito y mantuvo un círculo de clientes y
admiradores, a pesar de sus disgustos con la Corona y con la iglesia, que
fueron fieles y le apoyaron hasta el final. No obstante, su estilo, su manera
de pintar, sigue siendo tan especial hoy en día, que durante estos cuatrocientos
años desde su muerte, artistas, críticos, historiadores y alguno que pasaba por
ahí, no han parado de intentar definir qué era lo que el Greco trataba de decir
exactamente y por qué pintaba así.
Es imposible
saber qué quería decirnos el Greco, y aunque lo supiéramos, es posible que no
lo entendiéramos: al fin y al cabo han pasado cuatrocientos años y las cosas
han cambiado bastante.
No obstante,
fueran cuáles fueran sus intenciones, cualquier artista, incluido el Greco,
querría que todos disfrutásemos de su obra. Porque nos gustan sus colores,
porque nos intrigan sus gestos, sus retratos, sus miradas, sus manos, porque no
las entendemos y nos fascinan, porque crecimos con ellas, porque son hermosas.
Por lo que sea, disfrutemos y aprendamos de la obra del Greco, que ha llegado
hasta nosotros a través de tantos años y después de múltiples vicisitudes.
Si deseas saber más sobre este magnífico pintor, pincha aquí:
El Greco 2014
Museo del Greco
Museo del Prado: El Greco
No hay comentarios:
Publicar un comentario